Tres años.

Hoy es el dia de un aniversario, el tercer año. De algo que ocurrio, algo inesperado que me hizo cambiar a mi, y a todo mi entorno, solo que no se si realmente ellos se acuerdan que tal dia como hoy es cuando paso... Momentos de angustia, desesperacion, dudas tambien, incertidumbre y pena. Momentos que me separaron de ella para siempre, y que yo entonces no lo lograba ver de verdad, era demasiado niño para comprenderlo, para asimilarlo y para crecer de golpe. Tiempo que transcurrio despues sin saber que hacer, que decir, ni como actuar. A veces pensaba que sabia que debia hacer, pero no sabia como enfrentarme a aquella realidad que me tocaba desempeñar, a veces me hacia fuerte y lograba superarme, pero eran las menos, porque no podia, cada vez que superaba un obstaculo, otra vez me ponia a recordar momentos pasados, vivencias... mi vida... y otra vez acababa atrapado, sin poder continuar un camino... Nada tenia salida, nada iba bien, nada. Y ademas no sabia como podia hacer para que fuera bien, ya que mucha parte del tiempo, lo pasaba solo, en transporte, en zonas de H y sin comunicacion, con el resto del mundo. Hoy hacen tres años, mas o menos a esta hora, a mil y pico kilometros de distancia de aqui, pero las distancias no tienen nada que ver para con los sentimientos.

Me gustaria que lo pudieras leer, y si puedieras leerlo, nunca lo habria escrito.

2 comentarios

[x - 13 de octubre de 2004 - 01:52]

Lo que no nos mata, nos hace mas fuertes.F.Nietzsche

[Dunita de H - 07 de octubre de 2004 - 23:34]

No se celebran las penas. No puedes, o no podías, obligarte a crecer. No tenías que estar sólo. Nunca te alejarás de ella. No puedes cerrar el mundo y guardate lo que sientes para momentos como este. Se va creando un agujero y no precisamente para volver a la parte buena del cuento. Pero bueno, sólo tú sabes qué es este sentimiento, mientras yo sólo sé que es un buen homenaje escribir esto, un buen recuerdo. Aunque, es cierto que si lo hubiera leido, este final sería distinto... las cosas son como son y este es tu camino, pero si nos cruzamos será porque de alguna parte necesitas tener cariño. Un hombro, un pañuelo, y un beso... mi niño...

Besitos (a unos mil kilómetros por tierra, y a otros tantos por el aire, para que reciba tus letras allá en cualquier parte).