Libertad de la Voluntad.

La libertad de la voluntad, que en sí misma no es otra cosa que libertad del pensamiento, está limitada de la misma manera que la libertad de pensar. El pensamiento no puede ir más allá del horizonte hasta el que se extienden las ideas; sin embargo, éste se basa en las percepciones que se van adquiriendo y puede ampliarse conforme lo hace. Asimismo, la libertad de la voluntad puede expandirse también hasta ese mismo punto, si bien, dentro de tales confines, es ilimitada. Otra cosa distinta es el obrar de la voluntad; la facultad de hacerlo se nos impone de manera fatalista.

Friedrich Nietzsche.

7 comentarios

[hechi - 31 de octubre de 2004 - 00:55]

mmm interesante hache, muy interesante.
Besote

[x - 29 de octubre de 2004 - 15:09]

Nunca esperes nada.Esperar pertenece al camino de la fe de la esperanza, la cual ha destruido las espectativas de la humanidad por siglos.
Nuestro futuro es ahora es ya, solo nos pertenece este momento presente que nos sumerge, no hay nada mas.
Por lo tanto la frase podria quedar algo asi lo hare o no lo hare , y lo haran o no lo haran no hay nada mas.
O las cosas se hacen o no se hacen.

[H - 25 de octubre de 2004 - 14:55]

Estoy de acuerdo contigo x. Y esperemos que asi sea.

[Ever After - 24 de octubre de 2004 - 14:38]

Vamos que del dicho al hecho...

Me encanta la última frase: "Otra cosa distinta es el obrar de la voluntad; la facultad de hacerlo se nos impone de manera fatalista."

Un beso!

[x - 24 de octubre de 2004 - 14:33]

Ya GreGori en teoria deberia de ser asi, pero la idea de Nietzsche va mas alla.El no nos propone unos objetivos concretos ni una pauta de comportamiento a priori, solo nos hace ver una via del "alma", un camino, y para llevar a cabo todo sendero hace falta la voluntad, simplemente el ansia de poder.
Pero no entendamos el poder como un fin, o un estado, es simplemente decirnos a nosotros mismos, puedo conseguir cualquier cosa que me proponga.
Este es el hombre del futuro sin ataduras , solo de acuerdo a sus principios sabiendo respetar el entorno, siempre que exista respeto hacia uno mismo.
Los objetivos ya apareceran aunque tengamos una meta que no podemos divisar, pero teniendo ya la voluntad como estado inherente de la persona todo es posible

[x - 24 de octubre de 2004 - 14:24]

¡Amen!

[GreGori - 20 de octubre de 2004 - 13:42]

La limitación de nuestros pensamientos, supongo que se limita a nuestro bagaje conceptual (de ideas). Podemos pensar sobre lo que no conocemos, pero no sobre lo que no concebemos.
Sobre la voluntad... bueno, la voluntad no es nada sin unos objetivos, y si éstos se limitan, supongo que la voluntad también está confinada.
Un deseo que muere al formularse, en el fondo, no ha dejado de ser nada más que una idea o una emoción volátil...
Interesante blog